Resiliencia

Y esas madrugadas en las que es imposible no pensar en ti me despiertan muchos días y hoy es uno de esos días. Mis recuerdos me hacen esas jugadas en donde la nostalgia se quiere asomar igual que la tristeza, pero no las dejo entrar !!! Mis mensajes contigo entran en mi mente...Esta era la hora en la que empezábamos a escribirnos cada mañana:

El caso es que la nostalgia se apodera de mi y quiero escribir a su teléfono y me contengo...y allí en ese momento me vuelvo a repetir lo de cada día sin él, “resiliencia”, eso que me ha permitido seguir cada día más fuerte, enfocada y segura.

Y cómo siempre les digo, esto no es fácil, estos son los momentos de desahogo que me permito y no más, porque para mi la tristeza no es una opción, para mi no, y por eso les invito en el silencio a tratar de cursarse, a hablarse, hablen con Dios, existen horas claves o ideales para poder establecer una conexión casi palpable.

Cuando amanezco así mi cuerpo entero lo sabe, mi cuerpo esta muy conectado con mis emociones. Los días como hoy, sujeto mis recuerdos casi con mis manos, me meto a mis mensajes viejísimos con mi papito y empiezo a escuchar su voz en mi mente y me meto en esos días, voy a orinar muchas veces y me traslado de mi presente a mi pasado, es como si la cama en donde duermo fuera aquella en la cual me enteré de su partida.

Bueno el caso es que así es la vida y tenemos que saber cómo mantener nuestra mente, cuerpo y alma en la misma página porque sino es muy fácil desequilibrarse.

Hoy día vivo a plenitud con estos días y cuando me da esta sensación de querer correr y abrazar a mi papá, abrazo mis recuerdos y me hago amiga de la nostalgia para poner mi mejor cara y decir que le gano a mis lagrimas y sonrío con esa sonrisa que mi padre amaba ver en mi rostro.

Firma
La hija de Oswaldo Sandoval

#cosasquesientecaro