Nunca se sabe cuando tu palabra ayudará o destruirá a una persona. Nunca sabes a ciencia cierta que dejas en las personas y cual es tu misión en la vida del otro.
Durante estos últimos meses no se si por estar a punto de iniciar una nueva etapa ahora tengo resoluciones distintas.
Me queda claro que todo cuanto hagamos tiene una consecuencia y que definitivamente cada persona que pasa por tu vida es por algo único e irrepetible. Me queda claro que también que ahora al aprender más de los que han vivido más que yo es mi razón de ser.
Emular a todos aquellos que brillan con luz propia ni estilo de vida y ser cada día lo que sólo yo quiero y entiendo que es mi mundo. Aquello que me define como ser humano y me permite vivir y experimentar más a plenitud mis momentos. Hoy conversando sobre la noticia de un Christian Chávez me acordé una vez que nos encontramos en unos ensayos de unos premios y vi su sonrisa genuina y su manera sencilla de desenvolverse. Hoy tal vez ese chico que hizo bailar a muchos y reír a tantos esta sumido en su tristeza o en su búsqueda y es por eso que los invito a que oren por la paz mental y espiritual de todos aquellos que de alguna u otra forma tienen momentos de debilidad y encuentros con su yo interior.
El ser famoso no te aleja de las vivencias de cualquier ser normal y corriente todo lo contrario. Estar expuesto a la aprobación o desaprobación constante es un reto con el que viven todas y cada una de las personas que deciden vivir de esta industria . Seamos más compasivos, menos intolerantes y pensemos dos veces antes de emitir un juicio de otra persona.